Venimos de aquí: ¿Qué buscan los hombres en una mujer como pareja? (1ª
parte): https://usatumenteparapensar.blogspot.com/2024/09/3-que-buscan-los-hombres-en-una-mujer.html
Recuerdo que estos artículos hay que leerlos
en su conjunto, con perspectiva global, y sin saltarse el orden en que son
publicados.
En esta segunda
parte, me centraré en la parte externa de la mujer, puesto que ya nos centramos
en la interna en la primera. Aunque como ya dije, ambas van de la mano.
5) desea que no tenga un pasado promiscuo
Le guste o no
escucharlo a muchas mujeres, es así. Por eso es tan importante que las
adolescentes aprendan esto, antes de que sea demasiado tarde. Algunas adultas
se ofenden cuando se enteran de cómo piensan los hombres al respecto, pero es
lo que hay. Ellas olvidan que hombres y mujeres
son distintos, y no pueden esperar a que piensen de la misma manera.
Hay
mujeres que señalan que a los hombres les desagrada saber que se han acostado
con muchos porque eso les crea inseguridad a ellos, y sienten miedo a no estar a la altura, ni de ser
capaces de demostrar el desempeño y las habilidades amorosas-sexuales que ellas
buscan.
Esa conclusión es completamente subjetiva, siendo la
forma de autoengañarse que tienen muchas para justificar ante su propio ego el
porqué no encuentran un hombre maduro para una relación seria. La certeza es
que a un hombre le resulta imposible confiar en la persona que ha saltado de
cama en cama. Cree, y con razón, que, en cualquier momento, le será infiel,
ante circunstancias inesperadas o buscadas voluntariamente. Alguien que ha
entregado su cuerpo innumerable veces es visto como:
- un individuo que se regala con facilidad.
- que no tiene autocontrol sobre sus instintos.
- que no se respeta a sí mismo y que no se hace
respetar.
Nadie quiere a una mujer así, y menos que sea la madre
de sus futuros hijos. Si esto no lo quiere entender una mujer, tiene un serio
problema.
Algunas lo justifican como “nosotras también derecho a
un rato de placer”. Esa mentalidad es otro de los efectos de la revolución
sexual del siglo pasado (Las devastadoras consecuencias de la revolución sexual
de los años 60 en el mundo de hoy: ideología de género, promiscuidad,
destrucción de la familia, divorcios y abortos & Explicación bíblica: https://usatumenteparapensar.blogspot.com/2024/05/las-devastadoras-consecuencias-de-las.html).
Muchas mujeres creen, erradamente, que entregarse
físicamente a un hombre es la mejor manera de que él permanezca a su lado, para
así lograr sus deseos emocionales de tener pareja. Pero es todo lo contrario:
el hombre, el que no busca nada serio –que suelen ser los libertinos egoístas
que tienen relaciones casuales-, dicen: “Para qué me voy a esforzar en entablar
una relación seria con esta chica si ya me ha dado lo que yo buscaba”. O “para
qué voy a estar con una cuando puedo estar con muchas que se ofrecen con la
misma sencillez”.
En alguna ocasión he
escuchado a un famoso youtuber, insultar, de la manera más grotesca y
vejatoria, a los hombres y mujeres que tenemos una opinión negativa sobre la
promiscuidad, a pesar de las razones que ofrecemos. Ni siquiera respeta a los
que diferimos de él. Llega a afirmar, basándose en sus propios pensamientos y en
vueltas de tuercas argumentales rimbombantes, que el sexo casual no tiene
consecuencias. ¿Cómo que no? Aparte de los posibles embarazos (no existe medio
anticonceptivo completamente seguro) y del posible contagio de enfermedades
sexuales (con un aumento en mujeres que supera el 1.000%[1]), a nivel íntimo pasa factura, y mucha:
a) le rompe el corazón a las mujeres. Dicho
así, puede sonar pasteloso, pero, de nuevo, la biología dicta sentencia: tras
una relación sexual, el cuerpo de la mujer produce una hormona llamada oxitocina. Como ya expliqué al hablar en su día de
las diferencias entre el enamoramiento y el amor (https://usatumenteparapensar.blogspot.com/2020/02/1091-como-repercute-el-paso-del-tiempo.html), “provoca la confianza
en la otra persona y el apego. Esta hormona provoca el deseo de estar a todas horas con
el sujeto y demostrarle el cariño de todas las maneras posibles: abrazos,
besos, miradas y demás gestos de ternura. Disminuye el deseo de dormir y el
agotamiento pasa a un segundo plano, ya que es como una bomba que te mantiene
continuamente en un estado de alerta, pendientes del bienestar de la otra
persona”.
Por eso, el sexo
casual, termina por descomponer las
emociones: el corazón pide más adhesión al hombre a causa de esas oxitocinas,
pero se lo niegas. Es como si cuerpo y corazón terminarán viviendo en
dicotomías, en un puro contraste entre lo que desean los sentimientos (unirse emocionalmente) y lo le obligas a
hacer al cuerpo (separarse para siempre). Romper esa intimidad es antinatural.
De ahí el vacío que experimentan las mujeres tras el sexo de una noche.
Si alguna mujer cree
que lo expuesto es una falacia machista, le recomiendo echarle un ojo a este
escrito de la revista “Cosmopolitan”, que incide en la veracidad de lo que
acabo de explicar; eso sí, vulgarmente: https://www.cosmopolitan.com/es/sexo-amor/amor-pareja/a31185538/oxitocina-amor/
b) ¿Qué es lo que
sucede también? Que complica en gran manera tener intimidad emocional seria
cuando se busca: a más parejas, más dificultades para crear vínculos afectivos.
Es algo que vimos
tras analizar un estudio realizado en Estados Unidos por Nicholas H. Wolfinger
(Profesor de Estudios de la Familia y el Consumidor y Profesor Adjunto de
Sociología en la Universidad de Utah) y que detallé en “¿Hay razones objetivas
para permanecer virgen hasta el matrimonio? & ¿Tu “actividad sexual” pasada
y presente afecta a tu futuro sentimental?”: https://usatumenteparapensar.blogspot.com/2022/12/hay-razones-objetivas-para-permanecer.html). Aunque recomiendo leer ese artículo en su
totalidad, por si alguno no quiere hacerlo le dejo esta única frase de la
citada investigación: “(Los que
tienen) una pareja sexual de por vida, tienen los matrimonios más felices”[2]. Por el contrario, a
más relaciones, más infelicidad y divorcios. Los resultados eran los mismos
tanto si eran religiosos como si no.
6) desea que,
en su forma de vestir, sea recatadamente
elegante
Ambos términos parecen antónimos, pero no lo son: se
complementan. Recatado significa “decente, honesto, decoroso”, mientras que
elegante es “distinguido, refinado, estiloso”. Recatado no es “vestir como una
monja” o con “burka”, al igual que elegante no es “ir medio desnuda”. Todas las
mujeres, desde muy jovencitas,
sin necesidad de explayarse en explicaciones, saben perfectamente la
diferencia. Se puede vestir de forma atractiva
sin hacerlo de forma provocativa.
En primera instancia,
a un hombre le puede llamar más la atención la segunda forma, pero, en cuanto
el raciocinio toma de nuevo el control, lo verá como ordinario, puesto que todo
novio o esposo maduro preferirá, sin duda, lo primero.
7) desea que, en estrecha relación con el punto
anterior, no sea una exhibicionista en las redes sociales
No tiene
sentido alguno que una mujer emparejada suba fotos en bikini a una cuenta
abierta de Instagram: nadie, conocidos o desconocidos, ni siquiera sus amigos
varones, deberían verla así de expuesta. Algunas dicen: “No, esas fotos son
para mí, de recuerdo”. Saben que mienten, y ellas mismas lo reconocen, como
puedes comprobar cuando se sinceran: “Validación en el GYM” (https://www.youtube.com/watch?v=gDKQ73n3WUo).
Si esa fuera la intención, las guardarían en carpetas
privadas, en lugar de subirlas a ojos de todo el mundo, buscando comentarios
positivos y chutes de dopamina. Lo único que logran es que sean vistas como
personas inseguras, con una autoestima frágil –aunque aparenten brío-, y con un
estado de ánimo que depende de las opiniones y la validación de terceros.
Puede que alguna siga sin entenderlo, así que pondré
un ejemplo muy sencillo: ¿te gustaría que tu novio siguiera cuentas de
Instagram de otras chicas, y le dejara likes
y comentarios, piropeándolas? Lo considerarías una falta de respeto. Pues,
de la misma forma, para un hombre maduro es insustancial una mujer que se
muestra físicamente en las redes sociales sin tapujo.
Las razones que algunas argumentan para defender el
exhibicionismo femenino, ya las refuté, una a una, en “Del bikini al tanga,
pasando por los leggins y, con ellos, a la playa, el gym e Instagram” (https://usatumenteparapensar.blogspot.com/2023/06/del-bikini-al-tanga-pasando-por-los.html).
8) desea que se muestre físicamente atractiva
“Ya estás cayendo en
los estereotipos”, pensarán algunas. ¿De verdad piensas eso? ¿Es que acaso a
las mujeres no les gustan los hombres atractivos? No seamos hipócritas. ¡Pero
ojo! No estoy usando el término guapa,
sino atractiva. Aunque
lingüísticamente se consideran sinónimos, en la forma en que quiero referirme a
ellos, difiere su significado. Mientras que guapa
alude directamente a la belleza física, fruto directo de la genética, atractiva significa “atraer”, estando
más relacionado con el partido que le saca cada uno a su condición física, sea
más o menos agraciada.
A un hombre, aunque
le gusten las mujeres guapas –negar la belleza en la naturaleza sería negarnos
a nosotros mismos-, le atrae una mujer que se presenta atractiva. ¿Cómo es alguien así? Básicamente,
que se cuida y que se muestra saludable. Esto hace que una persona luzca más
atractiva, independientemente de unos rasgos u otros.
Si a una mujer no le
gusta un hombre con una barriga tan grasienta que le lleva a tener el ombligo
hacia afuera, con los músculos completamente flácidos o con un body tan delgado que parece un esqueleto
andante, no puede sorprenderse que, a un hombre, no le guste:
- una mujer
descuidada.
- que no hace ningún
tipo de ejercicio.
- que no se lava los
dientes.
- que se deja el
mostacho.
- que le sobran
muchos kilos por cada zona de su cuerpo.
- que se lava el pelo
una vez al mes.
- que basa su
alimentación en comida basura.
- que sale siempre a
la calle vestida como si fuera una vagabunda.
Sé perfectamente que
la sociedad, a través de los medios de comunicación e Internet, demanda unos
cuerpos y cánones de belleza irreales (como vimos en “¿La belleza física y un buen cuerpo pueden convertirse
en una tiranía y en una cárcel?” https://usatumenteparapensar.blogspot.com/2021/10/puede-convertirse-la-belleza-fisica-y.html). Hemos llegado a un extremo que esto conduce a las adolescentes, incluso a
niñas de once o doce años, a ir ya con minifaldas y tacones, usando varias
capas de maquillaje, que desnaturalizan sus rasgos faciales (Cómo nos
adoctrinan sobre nuestro cuerpo y qué hacer al respecto: http://usatumenteparapensar.blogspot.com.es/2016/06/como-nos-adoctrinan-sobre-nuestro.html). Pero, siendo conscientes de todo esto, para no caer
en dicha trampa, el secreto está en el equilibrio: ni obsesión ni dejadez. Así
que, tengas un rostro u otro, tengas una genética u otra, vela por tu cuerpo,
tu salud y tu apariencia.
Continuará
en “¿Qué buscan las mujeres en un
hombre como pareja?” (1ª parte)